Cuando tengas que elegir entre dos cosas, simplemente tirá una moneda.
Funciona no porque resuelva el problema por vos, sino porque en ese breve momento en el que la moneda está en el aire, súbitamente sabés lo que deseás que suceda.

Comentarios

Martín ha dicho que…
Muy bueno Gonza, me gustó...
Anónimo ha dicho que…
Que lindo, nunca lo pensé de esa forma.

Entradas populares de este blog

Debaixo dos caracois dos seus cabelos